DESCRIPCION
Nos remontamos al siglo XVIII, durante el reinado de los Borbones en España. La construcción de la fortaleza comenzó en 1740, simultáneamente con el Castelo do Cardeal (Castillo del Cardenal), ubicado en la orilla opuesta de la ría de Corcubión. Se denominó Castillo del Príncipe en honor al hijo de Carlos III de España, el futuro rey Carlos IV.
A finales del siglo XIX, el castillo dejó de ser propiedad estatal tras una subasta pública. Tuvo varios propietarios, siendo en 1985 el empresario gallego Xosé Ramón Oreiro quién realizó significativas reformas convirtiéndolo en una residencia de lujo.
Al igual que el Castillo del Cardenal, estaba equipado con 12 piezas de artillería en diversas torres orientadas al mar. Un gran edificio central dirigía sus alas hacia los semibaluartes del hornabeque, incluyendo las dependencias para la guarnición, que albergaba a 88 soldados, almacenes y polvorín. La estructura exterior, realizada en cantería finamente labrada y gran parte de las construcciones interiores, resalta magníficamente tanto desde el mar como desde tierra, donde tenía foso y puente de acceso al centro de la fortificación.
Actualmente se encuentra catalogado como Bien de Interés Cultural desde 1994, formando parte del Patrimonio Cultural de Galicia.